26 de octubre de 2013

Un loco sin su caja azul

Viajero errante, corriendo sin rumbo, visitando miles de mundos tan fugaces como el viento en susurro.
Descubridor de personalidades, buscador de acompañantes, visitante de desconocidos y viejas amistades.
Indagador de riesgo y diversión, de aventura y distracción, en mitad de un trayecto desconocido por todos. Oculto hasta para él mismo.

¿Quién es? Él también se lo pregunta, pues no lo sabe. Se engaña, interpreta y nunca se sabe. Ni siquiera cuándo charla seriamente.

Curioso e infantil a pesar de ser frío y severo, calculando cada movimiento pese a su inocente gesto.
Juega con mentes, mas la suya también es un juguete. Prueba y experimenta, como si eso funcionase. Examina reacciones y se entretiene.
Pícaro como él solo, astuto que a veces finge ser bobo. Observa a todo el mundo, analizándolo, en busca del no abandono.

¿Quién es? Él también se lo pregunta, pues no lo sabe. Se engaña, interpreta y nunca se sabe. Ni siquiera cuándo habla seriamente.

Seguro pero inquieto. Indeciso pero estable. De cambiante actitud según el momento, adaptándose a cada advenimiento.
Insensato discreto, respetuoso inescrupuloso, caballero sin dudarlo. Mas de ética y moral cuestionable, pues actúa según cree.
De extrema preocupación despreocupada, incansable que cansa, estudiante de todo y nada. Que forja historias alrededor de su existencia.

¿Quién es? Él también se lo pregunta, pues no lo sabe. Se engaña, interpreta y nunca se sabe. Ni siquiera cuándo conversa seriamente.

Alma rota, repartida entre miles de personas. Fragmentos extraviados, en manos idiotas. De engreída humildad y modesta superioridad.
Conducta inexplicable, de bondad dudable e importancia imperceptible. Deja granos de arena dispersos, que se pierden en el olvido.
Con temperamento inestable, con opinión variable. Pero firme a sus bases, firme a sus pilares. Todos ellos, siempre inmutables.

¿Quién es? Él también se lo pregunta, pues no lo sabe. Se engaña, interpreta y nunca se sabe. Ni siquiera cuándo dialoga seriamente.

Corrector corregible, juez que de mal y bien no distingue. De fácil descuido y despiste atento, que calla hablando, y cuando habla no dice.
Guardador de secretos, ocultador de verdades, mentiroso de pacotilla que engatusa con certezas claras como el día.
Impaciente que espera, paciente que exaspera. Todo debido a su complicado carácter, que ni siquiera él comprende. Siendo un extraño hasta para su intelecto.

¿Quién es? Él también se lo pregunta, pues no lo sabe. Se engaña, interpreta y nunca se sabe. Ni siquiera cuándo platica seriamente.

Contador de fábulas. Cumplidor de palabra. Amante de todo. Crédulo emocionado. Genio inconstante. Torpe permanente. Soñador inalterable. Vagabundo voluble. Hablador silencioso.

Pero nunca prestigioso.

1 comentario:

  1. Fabulosa redacción.
    Desde luego se ve que eres una persona sobre todo interesante y que puede llegar a merecer la pena conocer.
    Es difícil encontrar algo tan hermoso en este mundo.

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